28 agosto, 2012

Cuando la cocina se vuelve un arte

Saludos nuevamente,

El día de ayer, termine un libro de Nora Roberts, titulado “Lessons Learned” o en español “Sólo Trabajo”.

Llevo días con mi reto de lectura, leer todos los libros de una autora hasta hartarme, sin embargo, ayer termine un libro que jamás me imagine me enamorara tanto de la cocina. Este libro, trata sobre un chef italiano: Carlo Franconi, del cual, si existiera, me enamorara inmediatamente.

Creo que nadie podría cocinar pasta de una manera tan sensual como este personaje ficticio italiano. Ciertamente cuando dicen que la comida tiene ciertas propiedades afrodisiacas, sé que no mienten, sin embargo este personaje convierte la comida en afrodisiaca sin necesidad de tener estas propiedades. Cualquier mujer cocinaría si se sintiera como el libro dice.

La cocina siempre ha sido un placer para mi, he experimentado y cocinado de muchas formas, incluso, en el pasado, tenia unos hashtags en twitter #CocinandoConSissi que se hicieron algo conocidos; todos eran sobre tips de cocina que aprendía en mis clases, en mis experimentos, fotos, etc.

Hay muchas personas que piensan que la comida no es más que un sustento, yo, no obstante considero la comida como Carlo Franconi, un arte. No muchas personas pueden apreciar un plato por su esencia, su presentación. En El Salvador, la gente come en cantidad, no en calidad, ni en salud. Y la mayoria de veces nuestra comida tiende a ser muy grasosa.

Tuve la oportunidad de vivir en Francia unos meses y recuerdo que muchos que habían vivido antes en el otro lado del charco me dijeron, en Europa aprendes a comer. Incluso antes de irme, la película “Comer, rezar, amar” no eras mas que eso, una película.

Después de pasar muchos meses en Europa puedo asegurar que nadie regresa igual. Tu estomago se vuelve más demandante, tu paladar, tu mente cambian. Te vuelves exigente; después de comer una verdadera pizza italiana, ya no quieres cualquier pizza, las que has comido antes se vuelven una broma y la comida rápida ya no sabe mas que a chatarra.

Necesitas especies, necesitas comprar tus verduras y frutas, necesitas preparar tu comida. Comes más de lo que jamás habías comido y sin embargo, todo es tan saludable y tan bueno para ti que no engordas como antes.

No es lo mismo comer dos piezas de pollo frito a comer una pechuga a la plancha con salsa de hongos y ensalada, entrada y postre.

Muchos me dirían que lo que estoy diciendo no es más que una idea en mi mente, que aquí en El Salvador comemos diferente. Que Europa es Europa y que Latinoamérica es Latinoamérica. Pero yo les puedo asegurar que podríamos aprender muchas cosas de los europeos, como tantos ellos podrían aprender de nosotros.

He ido a muchos restaurantes en El Salvador y puedo decir que la diferencia con nuestra comida es el aceite, la grasa, los acompañamientos, el pan y la tortilla, el refresco, la gaseosa, el uso del consomé o los cubitos y muchas cosas que son parte básica de nuestra comida después de tanto tiempo. Y que son esas cosas, las que no nos dejan disfrutar de una comida natural, saludable y balanceada.

Sé que este post no tiene nada que ver con nuestro propósito de conocer El Salvador, pero al mismo tiempo tiene una forma de comparación entre nuestra cultura culinaria y la cultura culinaria de Europa. Y quisiera, aunque no sea este nuestra finalidad, que extranjeros como ustedes que leen nuestro post, conozcan un poco sobre la cocina.

Espero disfruten y sientan, como yo, que este post me salió del corazón,

Nos vemos luego,

No hay comentarios:

Publicar un comentario